La ciudad de Nueva York sigue seduciendo, sin importar las restricciones por COVID. Foto: Julienne Schaer

Nueva York a precios razonables: la Gran Manzana, más barata

Empieza el año nuevo en Nueva York disfrutando de la ciudad de la forma más asequible

by The Window Seat

Nueva York se merece su reputación de cara: en 2021 se convirtió en la ciudad más costosa de Estados Unidos para vivir. También puede resultar impracticable para muchos turistas de otras partes de Estados Unidos, acostumbrados a cervezas de un dólar y menús baratos. Sin embargo, dependiendo de cuándo y a dónde vayas exactamente, también se pueden encontrar gangas en Nueva York.

La mayoría de la gente visita Nueva York en primavera y otoño, cuando el clima es ideal y las calles bullen de gente. Pero cuanto más frío hace, más se abarata Nueva York.

Abrígate bien y visítala entre enero y marzo: encontrarás precios de vuelos y hoteles más bajos y muchas entradas con descuento a las principales atracciones, por no mencionar que también es más fácil conseguir reservas en algunos de los mejores restaurantes. He aquí nuestra selección de las mejores comidas económicas y atracciones gratuitas de Nueva York en sus cinco barrios.

Manhattan

Si piensas en Nueva York, probablemente te venga a la mente Manhattan, el barrio más visitado. Allí encontrarás el Empire State Building, el Rockefeller Center, Times Square, el Museo Guggenheim (ve un sábado de 4 a 6 de la tarde, que es gratis) y el Museo Metropolitano de Arte (el mayor museo de arte de Estados Unidos) y todos ellos están en el Upper East Side y el Midtown. El bono New York CityPass te permite entrar con descuento hasta en seis lugares de interés. En cuanto al alojamiento, el hotel contemporáneo Pod 39, mucho mejor de lo que se podría esperar por su precio, está muy cerca de las atracciones mencionadas y además es un punto de partida ideal para explorar tanto el Uptown como el Downtown.

Nueva York

Broadway se extiende a lo largo de Manhattan y es donde se encuentran algunos de los mejores espectáculos teatrales del mundo. Si estás preparado para hacer cola, conseguirás entradas para Broadway con hasta un 50 % de descuento en la caseta TKTS de Duffy Square, desde las 11 de la mañana para las funciones matinales del mismo día, y a partir las 3 de la tarde para los espectáculos que se celebren esa misma tarde-noche.

Aunque es sinónimo de rascacielos, a Manhattan no le faltan espacios verdes. Central Park tiene 337 hectáreas para explorar. La High Line, que va desde Hudson Yards hasta Chelsea, es una vía férrea en desuso convertida en un parque público elevado sobre la calle y que presume de arte gratuito. Después de recorrer sus 2,5 kilómetros, dirígete al Chelsea Market para probar la comida de alguno de sus 35 asequibles puestos, o pilla una porción en Joe’s Pizza, toda una institución del
Greenwich Village.

En el Lower Manhattan, el Muro de Bowery, en la esquina de Houston y Bowery, también alberga algunas de las obras de arte callejero de la ciudad, incluyendo, entre los artistas que han dejado allí su huella, a Banksy, JR y Shepard Fairey. Merece la pena visitar el Ten Bells en esta parte de la isla por su vino y tapas a buen precio.

El Bronx

La atracción más famosa del Bronx es el estadio de los Yankees y, tras un breve periodo funcionando como centro de vacunación, en 2022 volverá a recibir a los aficionados en sus gradas. Podrás animar a los Bombarderos del Bronx, más conocidos como los New York Yankees, desde tan solo
15 dólares.

Si no te acaban de tentar los perritos calientes del estadio, encontrarás algunos de los mejores restaurantes del Bronx a 15 minutos a pie del recinto. El difunto Anthony Bourdain puso a la cocina caribeña del Feeding Tree su sello de aprobación, gracias a la autenticidad de su pollo jerk (estilo jamaicano), y de sus currys con cabra o con gambas. Prueba Sam’s Soul Food, otro de los favoritos de Bourdain, por sus generosas porciones de chuletas de cerdo asadas con arroz,
guisantes y berzas.

Si todavía te queda hueco, Arthur Avenue es lo que muchos consideran la verdadera Little Italy de Nueva York. Pásate por Zero Otto Nove para degustar una pizza “Neopolitana” antes de hacerte con los mejores cannoli de la ciudad en la centenaria Madonia Brothers Bakery.

Brooklyn

Ahora que ya no se considera el pariente pobre de Manhattan, Brooklyn está recibiendo por fin el reconocimiento de albergar algunos de los lugares más emblemáticos de Nueva York, como Prospect Park, el Jardín Botánico de Brooklyn (si entras de día, pagas la voluntad), el antiguo y encantador parque de atracciones de Coney Island y el Puente de Brooklyn.

Cruzar el puente a pie es una de las mejores cosas gratis que hacer en Nueva York. Acércate a primera hora de la mañana o a última de la noche para verlo en sus momentos de menos ajetreo. Además, junto al puente encontrarás Juliana’s Pizza, considerada por muchos como la mejor pizza de Nueva York.

Una de las mejores partes de visitar Brooklyn es disfrutar de las vistas de Manhattan. El paseo fluvial de Brooklyn, a lo largo del East River, ofrece algunas de las mejores, o puedes tomar una copa en uno de los bares de las azoteas que hay a lo largo de la ribera, desde Dumbo hasta Williamsburg. Nos encanta el Rooftop Reds por su estelar carta de vinos elaborados in situ, producidos en su propia azotea. El Hotel McCarren, en Williamsburg, es un alojamiento más o menos económico, con una concurrida piscina exterior abierta en temporada y un bar en la azotea que ofrece dos por uno en su “happy hour”.

El Museo de Brooklyn, al borde de Prospect Park, es una alternativa (menos visitada pero igual de impresionante) a otras grandes instituciones de Manhattan. Su colección incluye obras de Cézanne, Monet y Degas y su entrada general es de pago voluntario, como una donación.

Queens

Queens es, sin duda, el barrio de Nueva York con mayor diversidad cultural. Una ruta gastronómica por los puestos y restaurantes de Jackson Heights te transportará desde el sur de Asia hasta Sudamérica, probando sabores indios, bangladesíes, colombianos y ecuatorianos. Tus dólares viajarán lejos en Junction Boulevard y Warren Street. Y si lo que quieres son tacos, que sepas que en Taco Veloz y Birria Landia, en Roosevelt Avenue, se forman largas colas por una buena razón.

Para quemar algunas de esas calorías que habrás sumado, visita el Flushing Meadows Corona Park. Con 363 hectáreas, es el parque más grande de Queens y alberga el Zoo de Queens, el Museo de Queens, el Citi Field (sede de los Amazin’ Mets) y el USTA Billie Jean King National Tennis Center, donde se celebra el US Open cada septiembre.

Los aficionados al cine también deberían pasar por el Museo de la Imagen en Movimiento de Astoria. Alberga la mayor colección de artefactos de televisión y cine del país, proyecta regularmente películas y es gratuito los viernes después de las 4 de la tarde.

Nueva York

Staten Island

La travesía para llegar a Staten Island, el barrio menos visitado de todos, es parte de la diversión. El viaje en el ferry de Staten Island desde el bajo Manhattan ofrece unas vistas magníficas del puerto de Nueva York, de la Estatua de la Libertad y del skyline de Manhattan. Además, el viaje de 8 kilómetros, que dura 25 minutos, es completamente gratuito.

Cuando llegues, verás que Staten Island tiene más espacios verdes que cualquier otro lugar de Nueva York. El cinturón verde de Staten Island cuenta con casi 1.214 hectáreas de exuberantes parques, humedales, bosques y rutas de senderismo. Cuando la temperatura acompañe, dirígete al local original de la cadena Ralph’s Ices, en Port Richmond, para tomar uno de sus famosos caprichos helados de 5 pavos.

Si buscas un poco de cultura, también encontrarás el Museo de Staten Island, una de las organizaciones culturales más antiguas de Nueva York, a sólo dos manzanas de la terminal del ferry, que alberga obras de Andy Warhol y Marc Chagall.